La primera vez que probé el limoncello fue en casa de mi hermano unas Navidades. Mi sobrina Laura y yo, terminamos con una botella y una caja de bombones!!. La noche fue "toledana", a mi me daba vueltas el techo de la habitación, por lo que decidí no irme a casa y quedarme a dormir allí. Laura y yo nos pasamos la noche visitando el baño y mi cuñada Tere con la fregona detrás...horrible!! Creo que no he vuelto a beber nunca más!!!
Todos los excesos son malos y hay que beber con moderación ;)
INGREDIENTES:
3 limones grandes
600 ml de orujo o aguardiente
600 m. de agua
300 grs. de azúcar
PREPARACIÓN:
Pelamos los limones con un pelador de patatas cuidando quitar la parte blanca para que luego no amargue. Metemos la piel de los tres limones en un bote de boca ancha y lo cubrimos con el orujo.
Cerramos el bote y lo metemos al frigo durante 14 días.
Yo lo miraba todos los días y lo movía un poquito para ver como iba adquiriendo un bonito color amarillo.
Transcurridos los 14 días preparamos un almíbar:
En un cazo ponemos el agua y el azúcar hasta que se disuelva completamente.
Dejamos enfriar, yo lo dejé toda la noche y a la mañana siguiente, colamos y rellenamos unas botellas bonitas para guardar y consumir poquito a poquito.
Aquí tenéis el néctar de los dioses:
Consumir con moderación...
Y A Gozar!!!